En las últimas décadas, el uso de los drones ha crecido exponencialmente en distintos sectores, demostrando ser una tecnología cada vez más popular tanto a nivel particular como profesional. Con su capacidad para volar y obtener imágenes desde una perspectiva única, los drones se utilizan en una variedad de industrias que van desde la toma de fotografías aéreas hasta la agricultura, la seguridad o la inspección y control de infraestructuras con drones. Pero… ¿te has preguntado si contaminan los drones?
La duda sobre el impacto medioambiental que pueden causar los UAVs comienza a despertar la curiosidad de algunos usuarios. Por ello es importante estudiar el impacto que pueden ocasionar estos dispositivos para entender qué consecuencias pueden tener a largo plazo en nuestro entorno.
Impacto ambiental de los drones
Existe cierta preocupación en relación a la contaminación que pueden producir los drones y su impacto ambiental en la naturaleza. Si observamos la legislación que regula su vuelo, veremos que existen zonas protegidas sobre las que está prohibido volar, como es el caso de los parques nacionales, reservas de la biosfera, zonas de conservación de fauna y otros espacios naturales protegidos, mejor conocidos como zonas ZEPA o LIC.
Estas medidas se toman principalmente con la intención de proteger la fauna y flora de los impactos que estos vehículos no tripulados podrían generar. Sin embargo, hay que considerar otros efectos que pueden ocasionar los drones en el ámbito ambiental, acústico, lumínico y electromagnético.
Contaminación ambiental de un dron
En términos generales, los drones tienen un impacto ambiental menor que otros métodos de transporte tradicionales, no solo por su menor tamaño, sino porque en vez de utilizar combustibles fósiles, en la mayoría de los casos funcionan con baterías de polímero de iones de litio (Li-Po).
No obstante, la fabricación y eliminación de algunos de sus componentes, más concretamente en el caso de las baterías, pueden tener impactos ambientales negativos, especialmente si no se reciclan adecuadamente. Por ello es importante el adecuado uso y cuidado de las baterías Li-po para tu dron y su posterior proceso de reciclado.
Contaminación acústica de un dron
Los drones, al igual que otros dispositivos electrónicos, generan ruido durante su funcionamiento. Cuando el ruido producido por los motores y hélices de los drones supera ciertos niveles, puede afectar negativamente a la vida silvestre y a las personas cercanas a dicha fuente de sonido.
Por ello se considera que el uso de drones en áreas sensibles, como áreas de anidación de aves o hábitats de vida silvestre, puede causar daños en el medio ambiente.
Contaminación lumínica de un dron
Hay otro tipo de contaminación que raras veces asociamos al uso de los drones: la contaminación lumínica. La normativa vigente dictamina que se puede volar un dron de noche, siempre que cumplan con unos requisitos obligatorios, entre ellos llevar luces homologadas.
Las luces utilizadas en estos drones pueden afectar a la vida silvestre nocturna y a la calidad del cielo nocturno. Por ello, cuando se realizan espectáculos de luces con drones se debe realizar en zonas permitidas y bajo las aprobaciones de los permisos necesarios para cada lugar.
Contaminación electromagnética de un dron
Los drones también pueden generar contaminación electromagnética, ya que estos dispositivos usan frecuencias de radio para su control remoto y transmisión de datos. La exposición a radiaciones electromagnéticas, especialmente a niveles elevados o de manera prolongada, puede ser perjudicial tanto para la salud humana como para los ecosistemas.
¿Contaminan más los drones que otros métodos de transporte?
Si bien es cierto que algunas partes de un dron y ciertas acciones durante el vuelo pueden afectar el medioambiente, la contaminación en relación a otros medios de transporte es mucho menor. A continuación vamos a comparar el impacto que pueden tener los drones en relación a los vehículos terrestres y aéreos.
Comparación con vehículos terrestres
Al comparar los drones con los vehículos terrestres, como coches, camiones y motocicletas, hay varios factores a considerar en términos de contaminación. Por un lado, los drones son generalmente más ligeros y consumen menos energía que los vehículos terrestres. Además, muchos drones funcionan con baterías eléctricas, lo que significa que no emiten gases de efecto invernadero directamente, como sucede con los vehículos de combustión interna.
Comparación con vehículos aéreos
En comparación con aviones comerciales y de carga, los drones pueden representar un menor impacto medioambiental por su menor consumo energético y tamaño. La mayoría de aviones funcionan con combustibles fósiles y emiten gran cantidad de gases de efecto invernadero.
En la actualidad, los drones para cine han sustituido los pesados y contaminantes helicópteros que eran necesarios para hacer filmaciones cinematográficas. Esto reduce significativamente la contaminación al eliminar la necesidad del uso de combustibles fósiles.
A medida que los drones se vuelven más sofisticados y se generaliza el uso de energías limpias, su impacto medioambiental disminuye.
